Una operación de inteligencia conjunta entre República Dominicana y Haití culminó con la detención de ciudadanos haitianos en territorio dominicano, quienes presuntamente intentaban adquirir drones tipo kamikaze para llevar a cabo ataques bélicos en suelo haitiano. Los detenidos están vinculados a una peligrosa banda criminal, según informaron las autoridades.
La coordinación entre los servicios de inteligencia de ambos países permitió desarticular esta amenaza antes de que la tecnología de armamento no convencional pudiera ser desplegada. Agentes del J-2 del Ministerio de Defensa dominicano colaboraron estrechamente con sus contrapartes haitianas en este esfuerzo conjunto.
Tras su detención, los implicados fueron entregados a las autoridades de Haití, donde permanecen bajo custodia. Se sospecha que forman parte de una red criminal más amplia, que busca explotar la situación de caos en el país vecino para expandir su control territorial mediante actos violentos.
El director de la Policía Nacional de Haití, Rameau Normil, ha señalado que estos grupos armados tenían la intención de utilizar drones para realizar ataques selectivos, lo que agravaría aún más la crítica situación de seguridad en la nación. Normil advirtió sobre el creciente nivel de sofisticación de estas organizaciones delictivas.
Haití enfrenta una crisis sin precedentes, con regiones enteras bajo el dominio de bandas armadas. Este intento frustrado de adquirir armamento avanzado revela la persistencia de estos grupos en mantener el poder mediante el terror.