Este lunes, el ministro de Educación, Ángel Hernández, abordó los señalamientos vinculados a la suscripción de un contrato el pasado septiembre entre la Universidad Abierta para Adultos (UAPA), institución de la cual es cofundador, y el Instituto de Formación y Capacitación del Magisterio (Inafocam).
Hernández defendió su postura como ferviente protector de los recursos destinados por la sociedad y el Estado para elevar la calidad educativa, atribuyendo los ataques que ha enfrentado a esta causa. Estos ataques se manifiestan a través de una campaña difamatoria dirigida contra su persona.
El ministro, quien asumió el cargo en agosto del año pasado, indicó que tras su nombramiento delegó la gestión de la UAPA a otros directivos, así como cualquier otra transacción privada.
Las declaraciones del funcionario resaltan que las críticas relacionadas con el convenio, el cual asigna 13 millones de pesos a la universidad para la implementación de una maestría de dos años en gestión de centros educativos destinada a 50 técnicos y directores, se fundamentan en la oposición de algunos sectores a las reformas implementadas por el actual gobierno.