República Dominicana ha logrado avances significativos en la atención a la parálisis cerebral, pero aún enfrenta grandes desafíos para ofrecer una respuesta integral a las personas que viven con esta condición y a sus familias.
Así lo afirmó Monika Despradel, presidenta de la Fundación Nido para Ángeles, durante una visita al Listín Diario con motivo del Día Mundial de la Parálisis Cerebral, conmemorado cada 6 de octubre.
Despradel destacó que, aunque en la última década se han aprobado leyes y políticas que demuestran mayor conocimiento e interés sobre el tema, “todavía falta mucho por hacer para garantizar una atención adecuada y equitativa”.
Explicó que la parálisis cerebral es una condición compleja que requiere un abordaje integral con atención médica, terapias, dispositivos de apoyo y educación especializada. Sin embargo, advirtió que los altos costos de los equipos, terapias y medicamentos limitan el acceso para muchas familias.
“Una silla de postura puede costar miles de dólares y no se fabrica en el país. Cada terapia de lenguaje cuesta alrededor de 3,000 pesos, y algunos medicamentos alcanzan entre 4,000 y 6,000 pesos mensuales”, precisó.
La fundadora de Nido para Ángeles indicó que la atención integral privada de un niño con esta condición puede ascender a entre 35,000 y 40,000 pesos mensuales, lo que representa una carga económica considerable.
“Estas familias necesitan seguros más robustos y una mayor protección social. Hay niños que podrán trabajar en el futuro, pero otros no, y serán dependientes toda su vida”, señaló, subrayando también el impacto físico y emocional que recae sobre los cuidadores.
Con casi 18 años de labor, la Fundación Nido para Ángeles es pionera en la atención exclusiva a niños y jóvenes con parálisis cerebral. Actualmente beneficia a unos 260 menores de entre 0 y 18 años, ofreciendo servicios médicos, terapéuticos y educativos mediante un equipo multidisciplinario.
Despradel explicó que la institución mantiene acuerdos con los ministerios de Educación y Salud, los cuales cubren alrededor del 49% de su presupuesto anual —estimado en 55 millones de pesos—, mientras el resto proviene de donaciones y recaudaciones.
En el marco del Día Mundial de la Parálisis Cerebral, la fundación promueve la campaña “Un llamado a la acción y a la empatía”, con el objetivo de sensibilizar al Estado, al sector privado y a la sociedad sobre la necesidad de apoyar a las familias que viven con esta condición.
Como parte de este llamado, la organización propuso cuatro acciones prioritarias: garantizar servicios de calidad, eliminar barreras arquitectónicas, combatir la discriminación y fortalecer las políticas públicas.
“Muchas personas con parálisis cerebral aún enfrentan grandes obstáculos para acceder a una educación de calidad, una atención de salud adecuada, un empleo digno y una participación plena en la sociedad”, concluyó Despradel.
“Ser empático es ser justo y solidario”, reiteró.