Oficiales con más de 30 años de servicio son beneficiados con un depósito de RD$ 300,000 cada uno
En una muestra de reconocimiento y respaldo a las Fuerzas Armadas, el gobierno encabezado por Luis Abinader ha destinado alrededor de 900 millones de pesos para apoyar a oficiales académicos en la adquisición de vehículos. Este monto, distribuido entre varias promociones, se ha convertido en un paso significativo para honrar a aquellos militares que han dedicado más de 30 años de servicio a sus respectivas instituciones.
Hasta el año 2020, los oficiales académicos que cumplían 20 años en las filas solían recibir una exoneración de vehículo de bajo costo. Sin embargo, este beneficio fue suspendido, dejando a los militares sin este incentivo. Ante esta situación, el presidente Abinader optó por una solución innovadora: entregar dinero en efectivo en lugar de exoneraciones.
Cada oficial beneficiado recibió un depósito de RD$ 300,000 en diciembre pasado, marcando una diferencia sustancial en comparación con las prácticas anteriores. Esta iniciativa tiene como objetivo asegurar que los recursos asignados lleguen directamente a los militares y eviten las complicaciones asociadas con la transferencia de exoneraciones a terceros debido a limitaciones financieras.
Aunque las autoridades militares mantienen en secreto los detalles específicos de las facilidades otorgadas, se ha confirmado que al menos tres promociones de oficiales fueron beneficiadas. Sin embargo, no se ha proporcionado información sobre la cantidad exacta de beneficiarios en esta acción.
Los oficiales pertenecientes al Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea han expresado su gratitud ante este gesto inesperado por parte del gobierno. Algunos oficiales, que llevaban tres años esperando este apoyo, compartieron su sorpresa y agradecimiento por la decisión del mandatario.
«Fue una sorpresa para todos. Teníamos la promesa de los superiores, pero no teníamos idea de cuándo se haría efectiva», mencionó un oficial a periodistas de Acento.
Es importante destacar que esta iniciativa se limita a los oficiales académicos que han egresado de las academias militares, excluyendo a aquellos que provienen de los centros de reclutamiento. Este enfoque busca reconocer y recompensar específicamente a aquellos que han dedicado tiempo y esfuerzo a su formación académica militar.