Desde finales de 2023, los automóviles provenientes de los 52 estados de EE. UU. y los 27 países de la Comunidad Europea pueden ingresar libremente sin pagar aranceles aduaneros. Este monumental cambio se deriva de los acuerdos de libre comercio DR-Cafta, firmados con cinco naciones centroamericanas y la República Dominicana, así como el tratado de comercio y desarrollo con Europa (EPA).

Esta liberación arancelaria también se extiende a los repuestos de automóviles, fortaleciendo aún más los lazos comerciales entre las regiones. Bajo el DR-Cafta, se establecen rigurosas reglas de origen, incluido el «método del costo neto», garantizando que entre el 35% y el 40% de los insumos utilizados en la fabricación de vehículos importados provengan de los países miembros.

El convenio DR-Cafta especifica que los vehículos con un cilindraje de 2,500 cm3 o menos pueden ingresar libres de aranceles, mientras que otros vehículos de mayor cilindraje, incluidos los «carritos» de 2,800 cm3, también se benefician de esta exención. Sin embargo, los vehículos eléctricos están sujetos a leyes específicas separadas.

Además de los automóviles, una amplia gama de vehículos comerciales y de recreo, como camionetas, bicicletas, yates y botes «jet ski», ahora pueden ingresar al país sin incurrir en tarifas arancelarias.

Este cambio histórico no solo tiene implicaciones en los precios y la disponibilidad de vehículos importados, sino que también marca una nueva fase en las relaciones comerciales entre las regiones. Con la eliminación gradual de aranceles a lo largo de los años, se espera que la competencia y la accesibilidad mejoren significativamente para los consumidores dominicanos.

En resumen, el fin de los aranceles para vehículos importados representa un hito en el camino hacia una mayor integración económica y una cooperación comercial más sólida entre la República Dominicana, EE. UU. y la UE.