El Ministerio Público ha puesto en marcha la primera fase de la Operación Atlántico, una ambiciosa ofensiva dirigida a combatir el proxenetismo, la explotación sexual comercial y el tráfico ilícito de migrantes. Esta iniciativa culmina semanas de intensa investigación llevada a cabo por un equipo multiagencial que profundizó en labores de inteligencia y el perfil de seguridad del municipio de Sosúa.
En este despliegue, que contó con la participación de 35 fiscales de la Procuraduría Especializada contra la Trata de Personas y el Tráfico Ilícito de Migrantes, así como de la Fiscalía de Puerto Plata, se sumó el apoyo de la Dirección General de Persecución y más de quinientos efectivos de diversas agencias estatales. Como parte de la acción inicial, se realizaron 29 allanamientos, interviniéndose 12 pensiones con más de 250 habitaciones y 17 centros de expendio de bebidas alcohólicas. Durante estas intervenciones, las autoridades rescataron a 174 mujeres, incluyendo seis menores de edad, y 22 hombres, además de incautar armas y otras evidencias vinculadas a los delitos investigados.
La procuradora general, Yeni Berenice Reynoso, destacó que la Operación Atlántico es más que una simple interdicción, formando parte de una estrategia más amplia que se desarrollará en varias fases. Un pilar fundamental de este plan es la aprobación por parte del Consejo Superior del Ministerio Público de la apertura de una fiscalía especial con sede en Sosúa. Esta nueva oficina tendrá la misión principal de mantener las acciones desplegadas y dirigir funcionalmente todas las investigaciones relacionadas con proxenetismo, trata y tráfico de personas, explotación sexual comercial, tráfico ilícito de migrantes y la venta de drogas narcóticas.
Este plan de acción, enfocado en Sosúa, cuenta con la colaboración interinstitucional de entidades como la Procuraduría General de la República, los ministerios de Interior y Policía y de Defensa, la Policía Nacional, la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), la Dirección General de Migración (DGM), el Ejército de la República Dominicana, el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani), la Dirección Nacional de Niños, Niñas, Adolescentes y Familia (Dinnaf), la División Especial de Investigación de Delitos Transnacionales (Deide) y la Policía Turística.
La segunda fase de la Operación Atlántico incluirá la consolidación de la fiscalía especial en Sosúa, la cual priorizará la lucha contra el proxenetismo, la explotación sexual comercial y el narcotráfico. Además, se implementará un patrullaje mixto de manera permanente, junto con interdicciones y labores focalizadas contra la venta de drogas. Un paso crucial será la creación de la Mesa de Coordinación Interinstitucional para la Seguridad e Iniciativas de Desarrollo Sostenible de Sosúa, entre otras importantes medidas.
