El Príncipe Harry está evaluando la posibilidad de regresar parcialmente al Reino Unido con el objetivo de reparar su imagen pública. Este movimiento se enmarca en un esfuerzo por mejorar las relaciones con la familia real y la percepción pública después de las controversias y las críticas que ha enfrentado en los últimos tiempos.

El regreso podría implicar visitas puntuales o apariciones en eventos importantes, en lugar de un retorno completo. Esta estrategia busca equilibrar su vida en los Estados Unidos con sus vínculos con el Reino Unido y demostrar un compromiso renovado con sus deberes reales y sus raíces familiares.