En una decisión sin precedentes, los 32 países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han acordado duplicar su objetivo de inversión en defensa, elevándolo al 5% de su Producto Interno Bruto para el año 2035. Este compromiso histórico, adoptado durante la cumbre celebrada en La Haya este miércoles 25 de junio de 2025, marca un incremento significativo respecto al objetivo previo del 2%.
La declaración final de la cumbre, respaldada por todos los jefes de Estado y de Gobierno, subraya un «compromiso inquebrantable con la defensa colectiva». La Alianza Atlántica justifica este ambicioso incremento del gasto militar ante las «profundas amenazas y desafíos a la seguridad, en particular la amenaza a largo plazo que representa Rusia para la seguridad euroatlántica y la amenaza persistente del terrorismo». Para asegurar el cumplimiento, no habrá excepciones para ningún país miembro, incluida España, y todos deberán presentar planes anuales que demuestren «un camino creíble y progresivo para alcanzar esta meta».
Uno de los pilares centrales de la organización, el Artículo 5 de su tratado constitutivo, fue rotundamente reafirmado, cerrando controversias anteriores. Los 32 países declararon de forma contundente: «Un ataque a uno es un ataque a todos», reforzando así el principio de defensa recíproca.
La cumbre también dedicó un fuerte apoyo a Ucrania. El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, reiteró el respaldo «irreversible» de la Alianza al camino de Ucrania hacia una futura membresía en la organización. El apoyo brindado a Ucrania por los países miembros de la OTAN, de hecho, se computará dentro de su gasto en defensa. Paralelamente a estos compromisos, se anunció un acuerdo crucial entre Ucrania y Dinamarca para la producción conjunta de armamento. Según reveló el presidente ucraniano Volodímir Zelensky, empresas de la industria militar ucraniana establecerán operaciones de producción en territorio danés, convirtiendo a Dinamarca en el primer país con el que Ucrania pone en marcha este tipo de iniciativa conjunta, lo que ayudará a evitar los riesgos de bombardeos rusos contra su infraestructura de defensa.
Las reacciones a la cumbre han sido diversas. El presidente estadounidense, Donald Trump, elogió el resultado como «tremendo» y un «gran éxito», mostrando su satisfacción por el respaldo de la alianza a su demanda de incrementar el gasto en defensa. Sin embargo, la cumbre también expuso tensiones internas. El presidente francés, Emmanuel Macron, hizo un llamado urgente a resolver el conflicto arancelario entre la Unión Europea y Estados Unidos, argumentando que una guerra comercial entre socios de la OTAN «no tiene sentido».
Esta cumbre marca, sin duda, un hito en la política de defensa de la OTAN, consolidando un frente más robusto ante las amenazas percibidas y reafirmando su compromiso con la seguridad colectiva en un panorama global complejo.
 han acordado duplicar su objetivo de inversión en defensa, elevándolo al 5% de su Producto Interno Bruto para el año 2035. Este compromiso histórico, adoptado durante la cumbre celebrada en La Haya este miércoles 25 de junio de 2025, marca un incremento significativo respecto al objetivo previo del 2%.){kind=link}