Las fantasías sexuales se reproducen en la mente de las personas cuando disfrutan de su cuerpo en soledad, acompañados, o incluso mientras sueñan despiertos o dormidos. Aquí es donde radica la confusión. Muchas personas piensan que nunca han fantaseado, pero si te paras a pensar, seguro que lo has hecho, ¡y eso está muy bien!

Muchas personas confunden el deseo y la fantasía, pero no es lo mismo. La fantasía nace y se recrea en la mente sin llegar a realizarse en la realidad, mientras que el deseo sí implica una intención de culminarlo.

Las mujeres suelen tener más tapujos en cuanto a aceptar que son mentalmente sexuales y creativas.

Fantasías sexuales comunes entre las mujeres:

1. Que otros las miren durante el acto: A muchas mujeres les gustaría hacerlo en zonas públicas donde es fácil que las vean. La libido se dispara solo de pensar en la situación y les gusta mirarse mientras realizan sexo en espejos.
2. Sexo con otra mujer, siendo heterosexual: Fantasear con experiencias con otra persona del mismo sexo, incluso siendo heterosexual, es más común de lo que se podría creer. Se cree que otra mujer podría tener una comprensión más intuitiva de los ritmos íntimos y la forma de estimulación.
3. Pensar en otra persona mientras se tiene sexo con la pareja: La mente busca variedad y estimulación adicional, lo que puede ayudar a combatir la monotonía en la rutina sexual.
4. Ser descubierta en pleno acto: Esta fantasía está vinculada con la posibilidad de ser sorprendida durante un encuentro íntimo, lo que despierta una sensación de morbo y adrenalina.
5. Ser una chica «mala»/ traviesa: Cansadas de ser siempre responsables, en su momento más íntimo les apetece ser la niña «mala» y no cumplir las reglas establecidas.
6. Ser dominada: A veces, las mujeres con muchas responsabilidades en su vida desean recibir órdenes en la cama, mientras que otras prefieren ser las dominantes, reflejando un deseo de tener más poder en la vida real.

Fantasías sexuales comunes entre los hombres:

1. Dominación: La popularidad de la saga «50 sombras de Grey» ha ayudado a que muchos hombres reconozcan su atracción por el mundo de la dominación.
2. Sumisión: Para muchos hombres que desempeñan un papel dominante en su vida diaria, la sumisión en el sexo puede ser un alivio y un equilibrio.
3. Tríos y orgías: Esta fantasía refleja el deseo de volver al lado más animal del sexo y puede ser una válvula de escape para la relación, siempre y cuando se establezcan límites claros.
4. Sexo en público: Tener sexo en lugares públicos sin ser descubiertos es una fantasía común. Necesita una pareja igualmente excitada ante la idea para que funcione.
5. Sexo anal: Una fantasía clásica en la que los hombres introducen su pene por el ano de otra persona.
6. Ver a su pareja tener sexo con otra persona: El cuckolding puede superar la rutina sexual y unir más a la pareja, aunque es necesario hablarlo y definir límites claros.
7. Sexo en lugares inusuales: Hacerlo en la cocina, en el balcón, o encima de la lavadora puede romper con la monotonía del dormitorio.
8. Roleplay: Asumir una identidad diferente durante el acto sexual está muy relacionado con las fantasías de dominación o sumisión, donde también se interpreta un papel.

En resumen, las fantasías sexuales son diversas y pueden variar según la persona. Aceptarlas y compartirlas puede enriquecer la vida sexual y fortalecer la relación.