Minneapolis. — Los Golden State Warriors anunciaron este miércoles que su base estrella, Stephen Curry, quedará fuera de acción por al menos una semana debido a una distensión leve en el isquiotibial izquierdo, sufrida durante el primer partido de la serie de semifinales del Oeste ante los Minnesota Timberwolves.
Curry, quien había sumado 13 puntos en apenas 13 minutos, abandonó el encuentro durante el segundo cuarto por molestias musculares. A pesar de su salida, Golden State logró imponerse por 99-88 y arrebatarle la ventaja de local al conjunto de Minneapolis.
Una resonancia magnética confirmó la lesión, y los médicos del equipo establecieron un período mínimo de recuperación de una semana, lo que lo descartaría para los próximos tres partidos de la serie: el segundo en Minneapolis (jueves), y el tercero y cuarto en San Francisco (sábado y lunes, respectivamente). En el mejor de los casos, Curry podría regresar para el quinto partido, programado para el 14 de mayo.
Aunque los Warriors han demostrado en el pasado su capacidad para competir sin su líder —como ocurrió durante tramos de los playoffs de 2016 y 2018—, el contexto actual es distinto. El núcleo histórico de la franquicia, conformado por Curry, Draymond Green y Klay Thompson, ha envejecido, y las figuras complementarias ya no incluyen a nombres como Kevin Durant o Andre Iguodala.
En su ausencia, el equipo californiano confía en el rendimiento colectivo mostrado en el primer juego, con Jimmy Butler, Buddy Hield y Draymond Green liderando el esfuerzo. El técnico Steve Kerr empleó una rotación amplia, utilizando a 12 jugadores, lo que será clave para sostener el ritmo ante un rival exigente como Minnesota.
Golden State buscará ampliar su ventaja este jueves, con la mira puesta en recuperar a su máximo referente para la recta final de la serie.
