Los Ángeles. – Una noche de poder cubano y dominio desde la lomita llevó a los Dodgers de Los Ángeles a una victoria 7-0 sobre los Rojos de Cincinnati, resultado que les permitió quedar en solitario en el liderato del Oeste de la Liga Nacional.
El protagonista ofensivo fue Andy Pagés, quien disparó dos jonrones frente a Hunter Greene: el primero en el tercer inning para abrir la pizarra y el segundo en el quinto, con Michael Conforto en circulación. Fue su segundo juego de múltiples cuadrangulares en Grandes Ligas.
Pagés terminó la jornada de 4-4 con dos vuelacercas, una carrera impulsada por error y un elevado de sacrificio, sumando protagonismo decisivo en cinco de las siete anotaciones de los angelinos.
En el montículo, el joven Emmet Sheehan firmó la mejor apertura de su carrera: siete entradas en blanco, con 10 ponches y apenas tres imparables permitidos. El derecho alcanzó un tope personal de 19 swings fallidos y se consolidó como pieza clave en la rotación.
La combinación de poder y pitcheo permitió a los Dodgers aprovechar la derrota de los Padres frente a los Marineros para tomar una ventaja de un juego en la división.
“Hoy todo salió como lo planeamos: bateo oportuno, defensa sólida y un pitcheo dominante”, destacó el mánager angelino tras la victoria. “Pagés sigue demostrando que puede marcar diferencia en partidos grandes, y Sheehan dio un paso adelante en su desarrollo”.