«Los precios del cobre han vuelto a superar la marca psicológica de los 10,000 dólares ante las expectativas del mercado de una posible escasez en el suministro, en un contexto donde se espera un aumento en el consumo, especialmente en la industria automotriz y las redes de transmisión, aunque también se observa una demanda menor por parte de China.

Los futuros del mineral en Londres cotizaban a media sesión alrededor de los US$10,035 por tonelada, lo que representa un aumento del 1.32% desde la apertura y se acerca a los niveles de US$10,200 registrados a finales del mes pasado.

En lo que va del año, el precio del cobre ha aumentado un 17%, impulsado por la posibilidad de que la producción no pueda mantenerse al ritmo debido a la obsolescencia de algunas instalaciones mineras.»

«Como resultado, en China se están reduciendo las compras de metal refinado en respuesta al reciente aumento de precios, con las fábricas chinas de alambre de cobre operando al 73% de su capacidad el mes pasado, lo que representa una disminución de 14 puntos porcentuales en comparación con el año anterior, según un informe recogido por Bloomberg.

Sin embargo, el mismo informe también ha señalado que la producción de derivados del cobre aumentó en abril un 1.6% en comparación con el año anterior y un 2% más de lo previsto.»