El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tomó la decisión de destituir a Paul Martin, inspector general independiente de la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID), según informaron diversos medios estadounidenses el miércoles.
La destitución se produjo tan solo un día después de que la oficina de Martin publicara un informe crítico sobre la estrategia de la administración Trump para desmantelar la agencia. Según reportes de The Washington Post y CNN, la Casa Blanca notificó a Martin mediante un breve mensaje el martes, en el que se le comunicaba su cese «con efecto inmediato», sin especificar los motivos de la decisión.
El informe elaborado por la oficina de Martin advertía que más de 489 millones de dólares en asistencia alimentaria estaban en riesgo debido a la orden del gobierno de Trump de congelar fondos y suspender operaciones de USAID. En el documento se identificaban «retos significativos» y se ofrecían recomendaciones para mejorar la eficiencia de la agencia en la prevención de fraudes, despilfarros y abusos.
No obstante, la reducción de personal en USAID, junto con la incertidumbre en torno a las exenciones de ayuda externa y las restricciones en la comunicación con organizaciones ejecutoras, ha debilitado la capacidad de la agencia para distribuir y proteger la asistencia humanitaria financiada por los contribuyentes estadounidenses, según el informe.
Trump ya ha removido a 18 inspectores generales, responsables de supervisar de manera independiente las operaciones del gobierno federal. En su segundo mandato, iniciado en enero, el mandatario ha emprendido una reestructuración del aparato gubernamental, con el respaldo de Elon Musk, uno de sus principales donantes y el hombre más rico del mundo.
Uno de los principales focos de esta iniciativa ha sido USAID, organismo clave en la distribución de ayuda humanitaria y en la implementación de programas sanitarios y de emergencia en aproximadamente 120 países. Con un presupuesto de 42.800 millones de dólares, USAID es considerada una herramienta crucial del poder blando de Estados Unidos en su competencia global con países como China.