El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, advirtió este jueves ante el Consejo de Seguridad que Haití enfrenta una “tormenta perfecta de sufrimiento”, en medio del colapso estatal y el avance de la violencia de las pandillas.
“La autoridad estatal se desmorona mientras la violencia de las pandillas se traga a Puerto Príncipe y se extiende más allá, paralizando la vida diaria y obligando a las familias a huir”, expresó Guterres, al tiempo que denunció ataques contra hospitales, escuelas y graves violaciones a los derechos humanos.
El jefe de la ONU lamentó que, pese a la magnitud de la crisis, “Haití sigue siendo vergonzosamente ignorado y lamentablemente subfinanciado”.
Las declaraciones de Guterres se produjeron un día después de que un grupo de siete países, entre ellos Estados Unidos, solicitara reforzar la misión multinacional de apoyo a la policía haitiana. De los 2,500 agentes prometidos, solo se han desplegado alrededor de 1,000, en su mayoría de Kenia.
La crisis política haitiana se arrastra desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021 y se agudizó tras la renuncia del primer ministro Ariel Henry en 2024. El consejo presidencial de transición ha prometido celebrar elecciones antes de que finalice su mandato en febrero de 2026.
Mientras tanto, la violencia sigue cobrando un alto costo humano: al menos 3,141 personas fueron asesinadas en la primera mitad de 2025, según datos del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.