La Guardia Civil española y la Policía Nacional de Colombia desarticularon una sofisticada red de narcotráfico conocida como de “narcos invisibles” o de cuarta generación, presuntamente responsable de introducir unas 120 toneladas de cocaína anualmente en Europa. En la operación, denominada “Galupa”, se incautaron 10 toneladas de la droga.
La acción conjunta dejó cinco detenidos —tres en España y dos en Colombia—, entre ellos dos considerados objetivos de alto valor, además de siete registros efectuados en ambos países, según informó este miércoles la Guardia Civil.
De acuerdo con los investigadores, la red mantenía vínculos con el Clan del Golfo, una de las organizaciones criminales más poderosas de Colombia, que servía como principal proveedor de cocaína para asegurar el abastecimiento a gran escala.
Los llamados “narcos invisibles” actuaban amparados en estructuras empresariales aparentemente legales, delegando las operaciones logísticas en intermediarios y testaferros para mantenerse fuera del radar de las autoridades.
“Su perfil bajo y su movilidad internacional les ha permitido permanecer años sin ser identificados”, señaló la Guardia Civil en el comunicado.
La investigación comenzó en 2022, cuando se detectó a varios miembros del grupo encargados de coordinar y organizar buena parte de los cargamentos de cocaína que ingresaban a Europa a través de puertos de Países Bajos, Bélgica y España.