El Comandante Especial de la División Caribe de la DEA, Michael Miranda, destacó los recientes operativos conjuntos llevados a cabo en la República Dominicana dirigidos a capturar a cuatro presuntos delincuentes mexicanos vinculados al grupo criminal «Los Rugrats», brazo operativo del Cártel de Sinaloa.
En una declaración contundente, Miranda subrayó la cooperación estrecha entre la DEA, la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), la Policía Nacional Dominicana (DICRIM), y la Procuraduría General de la República (PGR), enfatizando que estos esfuerzos enviaron un mensaje claro: «Los encontraremos, los arrestaremos y los llevaremos ante la justicia».
La Operación Jaguar, como fue denominada, no se limitó únicamente a incautar drogas y detener sospechosos, sino que también tuvo como objetivo proteger a las comunidades locales, fortalecer el estado de derecho y colaborar activamente en la lucha contra el crimen transnacional.
«La República Dominicana no tolerará ser utilizada como refugio para el narcotráfico. Tanto el Cártel de Sinaloa como cualquier organización criminal que busque explotar el Caribe están bajo aviso», afirmó Miranda.
Los fugitivos identificados como Carlos Alberto Páez Pereda, Luis Alfonso Páez Pereda, Daniel Hiram Jáquez Ortega y César Eduardo González Zavala, están siendo perseguidos activamente bajo la orden judicial de arresto No. 2025-AJ0041408, por violaciones a múltiples artículos del Código Penal Dominicano y la Ley 155-17 sobre Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo.
Miranda concluyó con un llamado a la unidad y determinación: «Continuaremos nuestra búsqueda implacable hasta que estas redes criminales sean desmanteladas y destruidas. Que la Operación Jaguar sirva como advertencia y promesa de justicia».
