Los líderes políticos que participan en la Cumbre de la Paz para Ucrania adoptarán este domingo una declaración que subraya la seguridad nuclear, defiende el control ucraniano total sobre la central nuclear de Zaporiyia, y aboga por la seguridad en el tránsito marítimo, especialmente en el Mar Negro.

El documento, resultado de dos días de deliberaciones entre más de cien delegaciones, incluidas más de 60 encabezadas por presidentes y jefes de Estado, aborda temas cruciales como la necesidad de poner fin al conflicto en Ucrania. Aunque hay divergencias sobre los métodos para lograr la paz, la declaración no especifica un camino claro hacia negociaciones formales con Rusia ni establece plazos concretos.

En cuanto a la seguridad nuclear, se enfatiza la importancia de que cualquier uso de energía nuclear sea seguro y respete consideraciones ambientales, rechazando categóricamente cualquier amenaza de uso de armas nucleares. Además, se destaca la necesidad de garantizar la seguridad de la navegación comercial en el Mar Negro y el acceso sin impedimentos a los puertos tanto en este mar como en el mar de Azov.

El tercer aspecto crucial de la declaración es de naturaleza humanitaria, instando a la liberación de todos los prisioneros de guerra mediante un intercambio completo entre Rusia y Ucrania, así como permitir el retorno seguro de los niños y civiles ucranianos ilegalmente retenidos.

Estos temas fueron discutidos en tres grupos de trabajo durante la cumbre, reflejando el compromiso colectivo de los líderes para abordar tanto las crisis humanitarias como las amenazas a la seguridad nuclear y el comercio marítimo en la región.