El secretario estadounidense, Antony Blinken, ha hecho un llamado urgente a la comunidad internacional para unirse en la lucha contra el fentanilo, una droga sintética devastadora que está causando estragos en Estados Unidos. Durante una conferencia de la ONU sobre estupefacientes en Viena, Blinken destacó la necesidad de abordar esta crisis de manera conjunta.

Blinken expresó su preocupación ante delegados de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDC), señalando que más del 40% de los estadounidenses conocen a alguien que ha muerto por una sobredosis de drogas sintéticas, convirtiéndola en la principal causa de muerte entre las personas de 18 a 45 años en el país.

El fentanilo, un opiáceo sintético 50 veces más potente que la heroína, se ha convertido en una amenaza global, siendo mucho más fácil y barato de producir. Estados Unidos ha culpado a laboratorios chinos de suministrar las sustancias necesarias para su fabricación a narcotraficantes, principalmente mexicanos.

El presidente Joe Biden ha priorizado este asunto, prometiendo 175 millones de dólares para la lucha internacional contra el fentanilo. La directora ejecutiva de la ONUDC, Ghada Waly, destacó que las drogas sintéticas representan una nueva amenaza, complementando la existente de las drogas tradicionales a base de plantas.

Blinken ha formado una coalición de 151 países para combatir los estragos del fentanilo, presionando especialmente a China para que intensifique sus esfuerzos contra esta droga que causa la muerte de decenas de miles de estadounidenses cada año. A pesar de ello, no se espera ninguna reunión bilateral entre Estados Unidos y China durante la conferencia en Viena, lo que refleja las tensiones entre ambas naciones respecto a este tema.