Las tensiones entre Estados Unidos y Venezuela se han intensificado en las últimas semanas, mientras el gobierno de Donald Trump aumenta la presión sobre el presidente Nicolás Maduro, acusado de narcotráfico y corrupción durante el primer mandato del mandatario estadounidense.
De acuerdo con The New York Times, algunos de los principales asesores de Trump, entre ellos Marco Rubio, John Ratcliffe y Stephen Miller, han sugerido la posibilidad de una operación militar para derrocar al líder venezolano.
Maduro respondió este miércoles asegurando que su país está preparado para defenderse de cualquier agresión extranjera.
“Si los gringos amenazan, más trabajamos; si los gringos atacan, responderemos. Pero el trabajo por la patria, por la salud y la educación del pueblo no se detiene”, expresó durante un acto transmitido por Venezolana de Televisión (VTV).
Rubio ha sido una de las voces más duras contra el mandatario venezolano, duplicando en agosto la recompensa por su captura y calificándolo como un líder ilegítimo que opera un “cártel en el hemisferio occidental”.
El gobierno de Trump también ha designado a varias organizaciones criminales venezolanas —entre ellas el Tren de Aragua y el Cartel de los Soles— como grupos terroristas, alegando que Maduro mantiene control sobre estas redes. Además, la administración estadounidense notificó al Congreso que se encuentra en un “conflicto armado” con ciertos cárteles de drogas, aunque sin especificar cuáles.
