Washington, D.C. – Estados Unidos instó este viernes al despliegue inmediato en Haití de la fuerza internacional liderada por Kenia, tras el asesinato de tres misioneros, entre ellos una pareja estadounidense, en un ataque perpetrado por pandillas criminales.
«La situación de seguridad en Haití no puede esperar», afirmó un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional. El presidente Joe Biden aseguró a su homólogo de Kenia el apoyo estadounidense para un «despliegue urgente» de la fuerza internacional en la nación caribeña.
Matan misioneros
Tres misioneros estadounidenses fueron asesinados por bandas armadas en un orfanato que alberga a decenas de niños en Lison 49, en Plaine, al norte de Puerto Príncipe. Este área ha estado bajo control de bandas armadas desde hace varios meses, según confirmó la organización Misiones en Haití.
Entre las víctimas se encontraban Natalie Baker y su esposo Davy Lloyd, hija y yerno del legislador del estado de Misuri, Ben Baker. «Mi corazón está partido en mil pedazos. Nunca había sentido este tipo de dolor», escribió el legislador en Facebook. «Fueron juntos al cielo. Por favor, oren por mi familia, necesitamos fuerza desesperadamente. Y oren también por la familia Lloyd. No tengo otras palabras por ahora», añadió.
La noticia fue compartida en redes sociales por el expresidente y precandidato republicano a la presidencia, Donald Trump, quien escribió en Truth Social: «Dios bendiga a Davy y Natalie. Qué tragedia. Haití está totalmente fuera de control. ¡¡¡Encuentra a los asesinos AHORA!!!»
En marzo, el Departamento de Estado de EE.UU. emitió un aviso de viaje instando a los estadounidenses a no viajar a Haití debido a sus condiciones de seguridad «impredecibles y peligrosas».
Natalie y Davy se casaron en agosto de 2022 y se mudaron a Haití tres meses después. En redes sociales, se puede ver cómo trabajaban principalmente con niños haitianos para la ONG Missions in Haiti Inc., fundada por los padres de Davy, David y Alicia Lloyd, en el año 2000.
Crisis de seguridad en Haití
Haití vive una espiral de violencia con matanzas, ataques, violaciones y secuestros a manos de poderosas bandas armadas, una situación que se ha agudizado desde finales de febrero pasado. El Gobierno interino de Haití anunció el pasado miércoles la prórroga de siete días más del toque de queda en el departamento del Oeste, donde se encuentra la capital, además de extender el estado de emergencia hasta el 8 de junio, con el objetivo de restablecer el orden y recuperar el control de la situación.
Para ayudar a frenar la violencia en Haití, donde el año pasado la inseguridad causó unas 8.000 muertes, se espera la llegada inminente de una misión multinacional liderada por Kenia.
