Kalina de Bulgaria, conocida como la princesa aventurera, ha sorprendido recientemente por su transformación física, atribuida a su riguroso entrenamiento con pesas, según reveló en una entrevista con LOC. Esta semana, se destacaron imágenes de ella junto a su esposo, Kitín Muñoz, en el entierro de Fernando I de Bulgaria, primer zar de la dinastía tras la independencia del país del Imperio otomano, cuyos restos fueron repatriados 76 años después de su fallecimiento en el Palacio Vrana de Sofía. Kalina, reconocida por su estilo único con colores vibrantes y llamativos turbantes, además ha explorado nuevos matices en su maquillaje, consolidándose como un ícono de la belleza innovadora dentro de la realeza.
La figura pública de Bulgaria reapareció recientemente en el ojo público, captando la atención por su notable cambio físico.
