Washington D.C. – Las autoridades de Estados Unidos y la República Dominicana firmaron este viernes un Acuerdo de Cielos Abiertos que incrementará la competitividad y que deberá traducirse en vuelos más económicos y mayor conectividad entre ambos países.
La firma del acuerdo se llevó a cabo en presencia del presidente dominicano Luis Abinader y del ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez. Por parte de Estados Unidos, estuvieron presentes el subsecretario de Crecimiento Económico, Energía y Medio Ambiente, José W. Fernández, y el ministro de Turismo dominicano, David Collado.
Abinader aspira a un puente aéreo
El presidente Luis Abinader calificó el acuerdo como un paso fundamental para el fortalecimiento de las conexiones internacionales y el desarrollo económico del país.
«Gracias a este acuerdo, los viajeros y transportistas tendrán acceso a una amplia gama de opciones de servicios. Las aerolíneas podrán ofrecer no solo tarifas competitivas, sino también servicios que respondan a las diversas necesidades de los ciudadanos y de nuestros visitantes. Se conectarán más puntos con mayores frecuencias y, sobre todo, con mejores precios», declaró Abinader.
El presidente añadió que aspira «a tener un puente aéreo entre la República Dominicana y varias de las ciudades donde más dominicanos y turistas tenemos». Según Abinader, el acuerdo no solo fomentará el turismo, sino también el comercio y el intercambio cultural.
Tras décadas de espera
El canciller Roberto Álvarez destacó que el nuevo instrumento permitirá a las líneas aéreas de ambos países ofrecer servicios más asequibles y eficientes, además de estimular el comercio desde y hacia el país.
«Se abren las puertas para un escenario sumamente atractivo para nuestras líneas aéreas y para los dominicanos y extranjeros que las utilizarán. Esto aumentará la competitividad con menores tarifas y desde más destinos, favoreciendo tanto el comercio como a los pasajeros aéreos», afirmó Álvarez.
El acuerdo de Cielos Abiertos marca un hito en las relaciones aéreas entre Estados Unidos y la República Dominicana, prometiendo un futuro de mayor conectividad y oportunidades económicas para ambos países.
