En un reciente artículo de opinión titulado «PRM: estrategia para comprar elecciones», el expresidente de la República, Leonel Fernández, ha lanzado fuertes acusaciones contra el gobierno actual, liderado por Luis Abinader.
Fernández, presidente y líder del partido Fuerza del Pueblo (FP), argumenta que más que ganar las elecciones, el gobierno de Abinader se dedicó a comprarlas. El líder de la oposición dominicana comienza su análisis destacando una notable desconexión entre la percepción pública y los resultados electorales.
Fernández señala que a pesar del descontento popular debido al bajo desempeño económico, el alto costo de la vida y la inseguridad ciudadana, el Partido Revolucionario Moderno (PRM) logró la reelección. Atribuye esto a una estrategia de compra de votos mediante programas de asistencia social.
En lo que define como «el retorno del clientelismo», Fernández critica la reorientación de los programas sociales, destacando cómo el gobierno actual amplió y manipuló estos programas para construir una base electoral.
Menciona la sustitución de la Tarjeta Solidaridad por la Tarjeta Supérate, y cómo esta última, a diferencia de la anterior, carece de la identificación del beneficiario, convirtiéndose en una «tarjeta al portador».
El aumento del número de beneficiarios y los montos otorgados, según Fernández, fueron utilizados con fines electorales, distribuyendo bonos y ayudas económicas en coincidencia con el ciclo electoral.
El expresidente también plantea la «manipulación mediática y cooptación de la oposición», reiterando la denuncia sobre la cooptación de alcaldes, dirigentes y diputados de la oposición mediante el uso abusivo de recursos del Estado, y la manipulación de encuestas y medios de comunicación para crear una percepción artificial del apoyo popular al gobierno.
Fernández argumenta que estas acciones, junto con una propaganda masiva financiada con fondos públicos, consolidaron una percepción de triunfo inevitable del PRM.
Además de estas acusaciones, Fernández subraya el impacto negativo de estas prácticas en la democracia dominicana. Sostiene que la compra de votos y la manipulación de programas sociales socavan los principios democráticos y distorsionan la voluntad popular.
El líder opositor también hace un llamado a la comunidad internacional y a los organismos de supervisión electoral para que presten atención a estos hechos y aseguren que futuros procesos electorales en la República Dominicana se realicen de manera justa y transparente.
Fernández concluye su artículo afirmando que «más que ganar unas elecciones, lo que el gobierno hizo fue comprar unas elecciones», señalando que esto se reflejó en el más alto índice de abstención en la historia electoral del país.
A pesar de las desventajas y la falta de recursos, la Fuerza del Pueblo, partido que lidera, obtuvo resultados que ninguna encuesta predijo correctamente.