viernes, noviembre 22, 2024
More
    spot_imgspot_img

    TOP 5 DE LA SEMANA

    spot_imgspot_imgspot_img

    Publicaciones relacionadas

    Cambita en Transición tras la Caída de Kiko la Quema

    El ocho de marzo de 2024 marcó un punto de inflexión para el municipio de Cambita, en San Cristóbal. Después de una prolongada persecución de más de cuatro meses, José Antonio Figueroa, conocido como «Kiko la Quema», fue abatido por las autoridades. Figueroa era considerado el principal operador del microtráfico en la región.

    Tres meses después de la desaparición de Kiko la Quema, el panorama del microtráfico en Cambita ha cambiado, aunque no ha desaparecido. La actividad delictiva se ha fragmentado. Un residente de Cambita Garabitos, mientras compraba productos agrícolas en el mercado, expresó su preocupación: “La venta de droga es como una serpiente de siete cabezas. Le cortaron una, a Kiko la Quema, pero le quedan seis, y están montando puntos de drogas por todas partes”.

    Cambita, un municipio agrícola destacado por su producción de aguacates, cacao, café, limones, chinolas, ñames, mangos y otros cultivos, además de ser un destino de turismo de montañas con importantes ríos y dos presas, continúa desarrollando sus actividades cotidianas con normalidad. La persecución constante de comandos armados por las calles principales, que abarcó Cambita Sterling, Cambita Pueblecito y Cambita Garabitos, ha cesado, y la rutina ha sido restaurada para los residentes, estudiantes y visitantes que transitan estas vías.

    En una reciente visita de Listín Diario, se pudo observar la riqueza natural de la zona, con montañas verdes y ríos caudalosos que normalmente permanecen secos en la llanura. La actividad económica se mantiene activa con camionetas cargadas de plátanos y aguacates que recorren las vías del municipio.

    A pesar de la desaparición de Kiko la Quema, su figura aún divide opiniones en la comunidad. Un joven comentó: “Él era como un arma de doble filo. Con la venta de drogas dañaba a los que la consumían, pero a los ladrones los marcaba y los metía presos. Esto estaba mal, pero ahora hay ladrones, vendedores de drogas y poca persecución”.

    La población de Cambita reconoce que el tráfico de estupefacientes es un problema generalizado, pero clama por un mayor control y seguridad en la región.

    ARTICULOS POPULARES