Durante casi una hora, el documental “El último secreto de Cleopatra” —producido por National Geographic y disponible en Disney+— invita al espectador a un viaje arqueológico lleno de historia, emoción y perseverancia.
En el centro de esta travesía se encuentra la dominicana Kathleen Martínez, abogada criminalista y arqueóloga, quien desde hace más de veinte años ha dedicado su vida a una misión: encontrar la tumba perdida de Cleopatra VII, la última reina del Antiguo Egipto.
El proyecto audiovisual, filmado durante dos años, acompaña a Martínez y a su equipo en una investigación que combina ciencia, historia y pasión. A través de imágenes reales, entrevistas y recreaciones visuales, el documental entrelaza dos historias paralelas: la de Cleopatra, la mujer que desafió a un imperio, y la de Martínez, la arqueóloga que lucha por desenterrar su legado.
Una antigua creencia sostiene que la tumba de Cleopatra jamás sería hallada por un hombre, una profecía que cobra un nuevo significado con la figura de Martínez. Contra todo pronóstico, la dominicana ha logrado avances que ningún investigador había conseguido antes.
Lo que empezó como un sueño personal, inspirado por la admiración hacia Cleopatra, se transformó en una auténtica misión de vida. Martínez dejó atrás una exitosa carrera en el derecho penal para dedicarse por completo a la arqueología, aplicando su experiencia como abogada criminalista para abordar la búsqueda como un caso de persona desaparecida: reconstruyendo los últimos pasos, decisiones y entorno de la reina egipcia.
A lo largo de los años, ha dirigido excavaciones en túneles, explorado zonas sumergidas bajo el Mediterráneo y liderado un proyecto que ha captado la atención del mundo académico y mediático. Cada hallazgo —desde templos ocultos hasta estructuras subterráneas— representa un avance hacia uno de los posibles descubrimientos más importantes del siglo.
Aunque la investigación sigue en curso, los indicios revelados en el documental apuntan a que la tumba de Cleopatra podría estar más cerca de ser hallada que nunca. De confirmarse, no solo se trataría de un hallazgo arqueológico sin precedentes, sino también del triunfo de una mujer dominicana que convirtió su sueño en una hazaña histórica.
