Una veintena de activistas del grupo Marea Palestina protagonizaron este domingo una sentada de protesta ante el ‘Guernica’, que obligó a desalojar la sala donde se expone el cuadro de Picasso en el Museo Reina Sofía de Madrid.
Con carteles que formaban la frase “Stop genocidio”, los activistas se sentaron en el suelo frente al cuadro de Pablo Picasso (1881-1973), lo que obligó al museo a desalojar a los visitantes de la sala.
Tras unos veinte minutos de protesta los visitantes pudieron retornar a la sala pese a que los participantes en la protesta seguían sentados frente al cuadro.
Con esta acción de protesta, Marea Palestina quería expresar su “exigencia de detención del genocidio contra el pueblo palestino”, aseguró la organización por medio de un comunicado.
Para el grupo, la inminente firma de un alto el fuego auspiciado por Estados Unidos “aún siendo una buena noticia para el pueblo palestino, es un espejismo de paz vergonzantemente aceptado por nuestro gobierno”.
Así, señalaron que “el genocidio no se ha detenido, ya que los efectos de la hambruna continúan y la entrada de ayuda humanitaria aún no es efectiva”.
Por eso considera necesario mantener la movilización social, la exigencia de un embargo de armas permanente, de apertura de corredores de ayuda humanitaria y de evacuación y reagrupamiento de los gazatíes que lo han solicitado.
Tras unos 40 minutos, el grupo concluyó la protesta y desalojó la sala tras gritar “Viva Palestina libre”.