SEATTLE. — Con el brazalete de capitán bordado en su uniforme y el liderazgo en el alma, Salvador Pérez volvió a demostrar por qué es el corazón de los Reales de Kansas City. El veterano receptor venezolano impulsó a su equipo a una importante victoria 6-3 sobre los Marineros, en una noche histórica desde el plato en el T-Mobile Park.
Pérez conectó tres imparables, incluidos dos dobles y un sencillo impulsor, remolcando tres carreras en momentos clave del encuentro. Su primer doble, en la quinta entrada, fue especialmente significativo: impulsó dos carreras que ampliaron la ventaja de los Reales y, al mismo tiempo, lo catapultó al sexto lugar en la lista de hits de todos los tiempos en la historia de la franquicia, superando a Alex Gordon con su imparable número 1,644.
No se detuvo ahí. En el séptimo inning, Pérez volvió a sacudir otro doble, el extrabase número 600 de su carrera, uniéndose a una lista de élite en Kansas City que incluye a leyendas como George Brett (1,119), Hal McRae (681), Frank White (625) y Amos Otis (623). Cerró su brillante noche con un sencillo productor en el noveno episodio para su hit 1,646, acercándose aún más a los grandes nombres en la historia de los Reales.
«Es un honor estar en esta lista con jugadores tan importantes para esta organización», dijo Pérez después del partido. «Pero más que los números, estoy feliz porque ayudamos al equipo a conseguir una victoria que necesitábamos mucho.»
Kansas City, que busca mantenerse en la lucha por los puestos de Comodines en la Liga Americana, mostró una ofensiva más dinámica tras un apagado primer juego de la serie. Anotaron desde el primer inning con un doble de Jonathan India y un sencillo de Maikel García, sumaron dos más en el segundo y tomaron control definitivo en el quinto con el batazo de Pérez.
El cuerpo de lanzadores también hizo su parte. Aunque el abridor Michael Lorenzen permitió tres carreras en menos de cinco innings, el bullpen respondió con eficacia: John Schreiber, Ángel Zerpa, Lucas Erceg, Steven Cruz y Carlos Estévez se combinaron para dejar en blanco a los Marineros el resto del camino.
La victoria no solo es clave en la tabla, sino en el ánimo de un equipo que ve en su capitán, Salvador Pérez, la guía emocional y deportiva para seguir soñando en grande en 2025.
