Australia ha tomado una medida contundente al cancelar la visa del rapero estadounidense Kanye West, conocido legalmente como Ye, tras la controversia desatada por su más reciente producción musical. La decisión, confirmada por el gobierno de Canberra este miércoles, se fundamenta en que su canción, titulada “Heil Hitler”, ha sido considerada una clara apología del nazismo, una ideología que las autoridades australianas se niegan a permitir en su territorio.
El ministro del Interior de Australia, Tony Burke, fue categórico al explicar la postura de su gobierno ante la emisora pública ABC. Burke afirmó que la nación no tolerará la promoción de tales ideologías, declarando: “Vas a tener una canción y promover ese tipo de nazismo; no necesitamos eso en Australia”. El ministro precisó que, si bien West había emitido comentarios ofensivos en el pasado, el lanzamiento de “Heil Hitler” el 8 de mayo –fecha que curiosamente marcó el 80 aniversario de la derrota de la Alemania nazi– impulsó una exhaustiva revisión de su estatus migratorio, lo que culminó en la revocación de su permiso. “Ya no tiene visa válida en Australia”, sentenció Burke.
Cabe destacar que la visa del artista no estaba destinada a la realización de conciertos, sino que correspondía a un permiso de nivel inferior que le permitía visitar a su esposa, la australiana Bianca Censori, y a la familia de ella en el país. El ministro Burke enfatizó la prioridad del gobierno de proteger la cohesión social y evitar la «importación deliberada de la intolerancia», subrayando que, aunque los ciudadanos australianos gozan de libertad de expresión, existe un límite claro cuando se trata de introducir discursos que glorifican el nazismo.
La polémica alrededor de Kanye West y su canción “Heil Hitler” no es exclusiva de Australia. Este tema ha provocado fuertes reacciones adversas en otros países, como Eslovaquia, donde el anuncio de un concierto del rapero para el mes de julio desató una gran indignación pública y una petición que reunió más de 3.000 firmas en pocos días. Organizaciones impulsoras de esta iniciativa en Eslovaquia manifestaron que la presentación de West sería un “insulto a la memoria histórica, una glorificación de la violencia en tiempos de guerra y una degradación de todas las víctimas del régimen nazi”, argumentando que el rapero «se adhiere repetida y abiertamente a símbolos e ideologías relacionados con el período más oscuro de la historia global moderna».
El controvertido videoclip de “Heil Hitler” muestra a decenas de hombres negros vestidos con pieles y máscaras de animales, formados en bloque y coreando el título de la canción. En el mismo, el rapero interpreta versos sobre sentirse incomprendido y sobre su disputa por la custodia con su exesposa, Kim Kardashian. El impacto de la canción se intensifica en su tramo final, donde se incluye un extracto de un discurso de Adolf Hitler, un recurso que ha sido interpretado por críticos y activistas como una apología directa del nazismo. La decisión de Australia de cancelar la visa de West se enmarca en un contexto internacional de creciente preocupación ante la proliferación de discursos de odio y la glorificación de figuras históricas asociadas con crímenes de lesa humanidad.