El Ministerio de Justicia y Seguridad Pública de Haití denunció este miércoles un presunto complot para asesinar al primer ministro interino, Garry Conille, junto a varios de sus ministros, en medio de la creciente ola de violencia que azota al país. Según un comunicado oficial, individuos que representan a ciertos sectores nacionales buscan sembrar el caos y el pánico atacando directamente a los líderes del Gobierno.

Ante esta amenaza, el Ministerio ha instado a las autoridades judiciales y policiales a tomar medidas urgentes para salvaguardar la seguridad pública, en particular la de los funcionarios del Estado, y garantizar el respeto al orden. Además, hizo un llamado a la población para mantener la calma y apoyar a las fuerzas de seguridad, las cuales cuentan con el respaldo de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad.

En paralelo, el gobierno de Estados Unidos condenó la violencia de las pandillas en Puerto Príncipe, afirmando que estas buscan desestabilizar al Gobierno haitiano. La Embajada estadounidense informó sobre operaciones conjuntas con las fuerzas de seguridad haitianas, destacando la incautación de armas y la neutralización de varios pandilleros.

Por su parte, la ONU advirtió que la situación en Haití es extremadamente frágil y ha empeorado en los últimos meses, con un incremento en la violencia de las pandillas, incluidos asesinatos, secuestros y violencia sexual. La directora de Unicef, Catherine Russell, alertó sobre las graves violaciones de los derechos de los niños, quienes están siendo reclutados por estos grupos armados.

Haití enfrenta una profunda crisis política y social desde el asesinato del presidente Jovenel Moise en 2021. El país sigue sin presidente y, aunque Garry Conille fue nombrado como primer ministro interino con el objetivo de pacificar la nación, la violencia sigue escalando, complicando los esfuerzos para organizar unas elecciones que no se celebran desde hace una década.